La bodega tiene más de cien años, fue fundada en 1904 por Marcos Gamba, inmigrante italiano que llegó a Uruguay en la década de 1870 en busca de un sueño.
La inspiración para cualquiera que toma una decisión tan drástica como mudarse de un continente al otro extremo del mundo es dejar un legado, hacer algo extraordinario, cumplir un sueño. Este era nuestro sueño
Un viñedo de cepas vitis viníferas de origen francés de alta calidad, que la familia trabaja conjugando técnicas artesanales con nuevas tecnologías, que preservan la armonía entre el suelo, la planta y el clima.
La ilusión que inspira a la Bodega El Capricho es el sueño familiar de compartir botellas exclusivas de la más alta calidad con otros amantes del vino alrededor del mundo. Con 7 exclusivas hectáreas de viñedo sustentable, únicas y suficientes para que esta pequeña bodega familiar persiga su capricho de embotellar sus sueños.